lunes, 28 de noviembre de 2016

The Last Story (WII)

El juego que se ubica en medio del triunvirato de RPG de WII (The Last Story, Pandora´s Tower y Xenoblade Chronicles) con pesos pesados de la industria entre sus creadores (Sakaguchi, Uematsu...) y un imprescindible de la consola según me llegaba por todos lados, se merece las 27 horas que he invertido en sacarle todo el jugo que encontré de camino al final de la aventura, The Last Story es un título con un fondo convencional pero cubierto con destellos originales y arriesgados que es sin duda un disco muy necesario en la colección de cualquiera, a pesar de ya no ser tan accesible como nos gustaría.


Empezando por lo que entra por los ojos, lo primero que me llamó la atención es la paleta de colores que usa, un poco apagada para mi gusto, aunque destaca realmente en ciertos puntos. La mayoría de escenarios y marcos en los que se desarrollaba la acción que recuerdo usan tonos fríos (verdes y azulados), y a pesar de que como digo, al principio me sorprendió esta decisión, según avanzaba en el juego me iba gustando más y más el tema visual, y no solamente hablo de texturas o elementos en pantalla si no que las animaciones y expresiones faciales las he visto también a un gran nivel y hacen que todo resulte un pelín más real.
Antes de ponerme a los mandos había leído que la variedad de escenarios dejaba un poco que desear, sin embargo, en mi opinión la diversidad en este apartado es realmente buena, además de que gozan de un detalle que no tiene nada que envidiar a otros títulos mucho más reconocidos que se mueven en dispositivos más potentes.

Tengo que reconocer incluso que al rodear a mi personaje según que ambientes he recordado otros muchos juegos muy distintos, desde algún Castlevania hasta incluso el mundo distorsión en el que nos introducimos en Pokémon Platino, cada uno recuerda experiencias distintas en estos casos pero creo que es de merecer que consiga evocar puntos tan diferentes ya que es la mejor forma de ejemplificar la variedad de escenarios y situaciones que nos podemos encontrar.
Y ya que menciono el detalle de todo lo que vemos a nuestro alrededor moviéndonos a través de castillos, cuevas, mazmorras... también quiero destacar lo mucho que me ha gustado la tecnología que crearon para este mundo y como la magia se mezcla con ella, así como las armas y armaduras que usamos para protegernos y darnos de espadazos evitando desfallecer.
Referente a esto, cada vez que nos cambiamos de equipo en el juego podemos ver un cambio visual en lo que llevamos encima, tanto en lo jugable como en las cinemáticas, cosa que se agradece mucho y que en todo RPG debería ocurrir porque cuando esto se obvia ofrece una imagen de poco cuidado.
También podemos usar tintes para cambiar el color de las prendas (¡e incluso volverlas invisibles!), aunque para mi gusto, los tonos por defecto son geniales y quedan como un guante a cada uno de los integrantes del equipo. Al mejorar un arma podremos observar un ligero cambio y cuando llega a su máximo exponente o sufre una gran subida de estadísticas se comienza a distinguir un aura rodeándola que hace ver su poderío.

Dicho esto, como siempre no todo puede ser bueno, podemos distinguir dos tipos de cinemáticas, las realizadas con el motor del juego y las que son simplemente un vídeo que se cuela por medio (bastante chulos en este caso a decir verdad), pues son en las que usan el motor en las que nos encontramos con problemas. Se deja notar una desincronización entre los labios de los personajes y los diálogos (digamos a su favor que está doblado a inglés o japonés dependiendo del territorio) y en mi experiencia personal, en una de las susodichas escenas, un NPC que transitaba la ciudad atravesó como si de un fantasma se tratase al personaje con el que estaba hablando mientras estaba sentado en una escalera.
Además de esto, sufre de unas ralentizaciones y bajones de framerate en ciertos puntos bastante importantes, no lo vuelven injugable ni mucho menos, pero son tremendamente molestas y alcanzan su momento álgido en cierta batalla con un boss y en menor medida cuando hay muchos enemigos en pantalla.

Resumiendo, el tema gráfico me parece que está ejecutado de una forma muy inteligente, si no intentas sacarle sus puntos flacos a este apartado se ve realmente bien y detallado cuando simplemente juegas, podemos decir que de lejos y a media distancia es muy bueno pero cuando acercas la cámara o te fijas en algo en concreto... sale a relucir lo peor que tiene, se pueden ver elementos muy desenfocados y carentes de vida, la paleta de colores y los filtros no ayudan para nada en estos momentos, y además, hay algunos efectos un poco reguleros como los reflejos de luz que parecen focos a toda potencia o fluídos que se asemejan más a bloques que a lo que son realmente. En contraposición, cosas como el agua en la que puedes nadar o los tejidos (velas de los barcos...) sí me sorprendieron para bien, pequeños detalles como que el menú de cargar partida vaya cambiando según los acontecimientos que ocurren en tu partida son puntazos. Como digo, ninguna queja en este tema, me parece que sacan mucho potencial de la consola y una vez te acostumbras a su estilo lo disfrutas continuamente.

Dejando de lado lo visual, durante el transcurso de nuestras andanzas irán apareciendo pequeños tutoriales muy sencillos que introducen poco a poco la gran cantidad de mecánicas que podemos usar en combate o para avanzar. Las batallas en un primer acercamiento pueden resultar un tanto confusas, pero gracias a las muchas formas de salir de un apuro que acabas teniendo, cuando consigues pillarles el truco resultan muy satisfactorias, dadle tiempo a que os muestre todo lo que puede ofrecer. Este punto posee cierto componente estratégico que te hace sentir útil y no solo un machacabotones sin sentido (para que os hagáis una idea con algo más actual, me recuerda al "modo espera" que hemos visto en FFXV), como añadido, el permitirte hacer combos entre varios personajes del grupo refuerza aún más esta sensación.
Aprovecho para decir que he jugado con el mando clásico, por lo que no puedo decir mucho sobre el control con el WiiMote y el Nunchuck. Tenemos dos opciones para el combate, tener que estar pulsando un botón cada vez que queremos lanzar un ataque o golpear por proximidad al enemigo más cercano, yo he optado por este último tras el trauma que sufrieron mis pulgares cuando tuve que vencer a Úrsula en Kingdom Hearts, quitando este detalle, creo que es la mejor opción (aunque a veces juegue malas pasadas) por ahorrarte muchísimas pulsaciones continuas, pero esto ya va más en los gustos de cada uno.
Como consejo para sufrir menos en los combates, usad las bombas que están desperdigadas por el escenario, que aunque parezcan de adorno al principio, son muy útiles. Por otra parte, leed lo que os comentan vuestros compañeros en las peleas contra jefes, os repetirán (hasta la saciedad U.U) el punto débil que debéis explotar de éstos para llevaros la victoria.

Tirando por el terreno de dichos jefes, las batallas tienen su gracia y son originales en cierta manera, se han comido el coco para que no sea simplemente un trámite que pasar a base de fuerza bruta y subida masiva de niveles. Como decía, tienen un punto flaco al que recurrir para poder acabar con ellos, una vez lo descubres o te lo comentan tus compinches basta poner en práctica la estrategia correcta para que no duren mucho en pie, esto tiene sus cosas buenas y no tan buenas, es obvio que tener que fijarte en donde radica la debilidad del mastodonte de turno ayuda a mantener al jugador pendiente y que, de nuevo, no sea solo un mero interruptor que acciona el botón de golpear, ahora bien, una vez le has pillado la medida, te lo puedes ventilar en nada de tiempo.
Podemos repetir misiones para conseguir objetos raros o valiosos, se nota mucho cuando vas a mayor nivel y apenas tardas un par de minutos en volver a pasar por la gran parte de las zonas, puedes saltarte las cinemáticas y como ya sabes como vapulear a lo peor de la mazmorra, estarás de vuelta en un lugar seguro en menos que canta un gallo y con cosillas en tu inventario que merecen mucho la pena (en la mayoría de casos) aparte de algo de experiencia que nunca viene mal, en todo caso, si la pereza puede con vosotros, esto es algo totalmente opcional y tampoco os perderéis nada vital para avanzar.
Hay varias partes que tiran de sigilo o de ir poco a poco atrayendo la atención de los enemigos de manera escalonada y que en mi opinión, le dan un poco de variedad a las misiones y están bastante bien hechas, hay mecánicas pensadas para estas situaciones y si lo haces como debes puedes ahorrarte algún que otro combate multitudinario (aunque que suelte un grito de loco cada vez que le zurra a alguien corta un poco el rollo xD), eso sí, los enemigos están medio ciegos (como en muchos otros juegos) y eso no se lo quita nadie.

Por último, no quiero dejar de mencionar el tema del farmeo, algo presente en un montón de RPG y que en este caso, creo que está brillantemente implementado. Cada poco tiempo nos encontraremos con una zona en la que se nos permite invocar una y otra vez enemigos hasta que nos cansemos, ¿Por qué me parece una decisión fantástica? Pues porque si vamos a tener que subir niveles, que mejor que hacerlo de una manera cómoda y rápida, prefiero quedarme un par de minutos peleando continuamente a tener que andar corriendo de un lado a otro de un pasillo buscando combates aleatorios.
Soy consciente de que no es el único juego que hace algo así, pero no por eso hay que dejar de alabar lo "agradable" que resulta subir niveles de esta manera. De todas formas, con mi experiencia os puedo aconsejar que uséis estas zonas hasta que notéis que tardáis más de un par de combates en adquirir la experiencia necesaria para aumentar un nivel, normalmente llegaremos con los personajes un pelín por debajo de lo recomendado, por lo que al encontraros estos bastiones del farmeo podremos subir un nivel entero con solo una batalla, con lo cual por dos o tres minutos de peleas os iréis con cuatro o cinco niveles más en vuestro grupo. A pesar de esto, no creo que sea obligatorio en ningún momento, el juego tiene una dificultad bastante asequible siempre que sigáis estos consejos (no puedo hablar más allá dado que en mi partida fui haciendo esto, quizá si ni pisamos las zonas de invocación continua de púgiles todo se vuelva mucho más difícil), pero como digo, las batallas me resultaban tan cómodas que peleaba hasta cansarme por voluntad propia, y es que en The Last Story, farmear no me hacía morirme del asco, es más, era satisfactorio la mayoría de las veces, lo cual creo que es la mejor baza para demostrar las bondades del sistema de combate.
Además, hay partes en las que separarán al grupo durante mucho tiempo y cuando los personajes olvidados vuelven, estas zonas son realmente útiles para equilibrar de nuevo a todo el equipo, pero en líneas generales, se te permite llevar la mejora de los personajes como prefieras, con más o menos dificultades, no creo que sea imposible avanzar hagas lo que hagas respecto a este tema con unos límites bastante flexibles.
Como apunte, creo que un bestiario hubiese sido un puntazo y que le pega bastante por todos los tipos de enemigos distintos que nos encontramos, un pelín de información extra de cada uno sería genial, pero esto ya es pedir por pedir.

Dicho todo esto, podemos meternos en lo que más llama la atención de estos juegos, el argumento. Empieza de una forma un poco caótica pero interesante, tal y como te cuentan las cosas al principio cuesta un poco situarse pero se arregla al rato de entrar en el meollo, el título se divide por capítulos (44 en total, aunque te puedes perder algunos) de los cuales los primeros tienen una duración ridículamente corta, hasta el punto de comenzar uno de ellos, enseñarte una escena y darte el control apenas unos minutos, y que entre otra escena dando fin al susodicho, más tarde se corrige y pasan a tener una duración más lógica (¿Quizá pretenden darte la impresión de que avanzas continuamente al principio para engancharte más?).
Durante la historia he tenido la sensación en un par de momentos que las situaciones y las relaciones entre personajes ocurren de una forma un tanto forzada, y que se dan demasiada prisa en desarrollar según que cosas a pesar de esa cantidad de capítulos, no he notado que sea un juego corto, pero creo que el tiempo que dura está un poco mal distribuido, hay algunas fases "de relleno" que no aportan demasiado a la historia y que se llevan dos o tres capítulos por delante para desenvolverse (aunque algunas de ellas, como la mansión encantada, son un soplo de aire fresco para salir un poco del mismo ambiente).

Algo que me ha encantado es que tenemos un montón de incentivos para explorar, podemos obtener más información sobre el mundo y las relaciones entre las gentes que lo habitan si paseamos a fondo por los escenarios, referente a esto también tengo que decir que está muy bien llevado, no ocurre como en algún que otro juego en el que tenemos que leer una biblia entera si queremos empaparnos de todo su universo, aquí nos ofrecen más datos pero sin obligarnos a tragar páginas y páginas de manuscritos, se introduce de una forma amena y poco a poco.
Además de esto, si nos acercamos a los NPC podremos escuchar sus conversaciones y obtener aún más información sobre cosillas interesantes para aquellos que se paren a escucharlas todas, eso sí, cada vez que rodeemos al mismo grupo se repetirá la charla una y otra vez y queda un poco raro, pero vaya, no creo que se pudiese hacer mucho mejor.
Entrando en la ciudad nos daremos cuenta de lo viva que parece estar, siempre te ofrece algo que hacer o algún evento aparece repentinamente, me parece muy competente para desenvolverse en WII, también podremos aceptar misiones secundarias distintas, que si bien algunas son muy chorras (tráeme tres huevos, azúcar y un coco para cualquier tontería...) alguna que otra es muy interesante e incluso introduce alguna mecánica nueva como cabalgar sobre bestias.
Por contra, algo que odio (y que no afecta solamente a este juego) es que una gran parte de las cinemáticas y escenas se activan por proximidad y sin previo aviso, es decir, si estás en plena exploración y te acercas al camino que debes seguir para continuar con la historia sin pretenderlo, te cortan totalmente tu travesía por los recovecos de la mazmorra de una manera muy fastidiosa, cierto es que la mayoría de veces puedes volver sobre tus pasos pero aún así...resulta molesto, así que mi consejo es que si, por ejemplo, os están hablando los miembros de vuestro equipo, quedaos quietos hasta que terminen, ya que si continuáis vuestro camino puede que ocurra lo mencionado y os quedéis sin saber que os iban a decir.

Todo tiene un regusto a los mejores Final Fantasy, lo cual siempre es bueno, recordar las canciones de Garnet y el romance que aparece en la novena entrega o la mezcla de tecnología y magia además de todo el tema de la corriente vital que aparece en la séptima es un placer. Aunque claro, que se compare con obras maestras de tal magnitud pues hace que salga un poco mal parado, me parece que está demasiado inspirado en éstos, me hace sentir un pequeño deja vú (los problemas de la vida de la corona, el tema medio ambiente...) un poquillo más de originalidad no sobraría.
Para reforzar lo que digo, da la sensación de que los creadores han cogido "la guía para hacer un RPG medieval" y la han seguido al pie de la letra, los personajes son clichés con patas (aunque tienen algunos puntos graciosos no se libran del exceso de ñoñería), el argumento se ve venir a la legua desde cierto punto...si os decidís a jugarlo, no lo empecéis esperando lo mejor en cuanto a historia. Tampoco pretendo decir que sea un punto negro en su ficha ni mucho menos, simplemente recomiendo dejarse llevar y disfrutar sin más porque si empezáis a sacarle pegas, veréis que falla en estas cosas y os fijaréis más en sus topicazos que en sus cosas buenas.

Hay alguna que otra salida de aprietos que se sacan de la manga, algún que otro acontecimiento que pasa en el sitio adecuado en el momento justo, poder abrir puertas en la base enemiga en plena guerra sin ningún problema, que separen al grupo encerrando a una de las partes y que se abra una compuerta casualmente por la que puedan salir...cosas de ese estilo.
Se utiliza un narrador cada cierto tiempo que si bien está usado de una forma más que correcta, se aprovecha bien y no se usa en exceso, es el recurso fácil para contar en vez de enseñar. No he visto que se les vaya mucho la pinza con la historia, es creíble dentro del universo que nos presentan y no se pasa de estrambótica además de mantenerte pendiente e interesado en lo que te dicen.
Durante toda la aventura tenemos una serie de puntos en los que se nos obliga a decidir entre dos opciones para responder o para decidir que acción realizar, a falta de explorar todas las posibilidades, no he visto que las respuestas que elijas tengan una repercusión en el devenir de la trama, incluso cuando "te equivocas" se te obliga a rectificar tras escuchar un pensamiento del personaje. En mi opinión, ya que se tomaron la molestia de implementar esto, podría habérsele dado mucha más presencia e incluso haber desarrollado dos rutas que te lleven a finales distintos en base a las decisiones más importantes del juego, teniendo en cuenta que no es extremadamente largo para el género en el que se engloba, no lo veo como algo descabellado.

En general no quiero dar a entender que la historia sea mediocre, simplemente es algo fácil de digerir, y que se basa en cosas que ya hemos visto mejor ejecutadas otras veces, sin embargo, bebe de los mejores y merece mucho la pena si tienes una WII y puedes darle caña sin tener que vender un riñón para adquirirlo.
No quiero dejar sin mención la excelsa banda sonora, realizada por uno de los genios de la industria, Nobuo Uematsu, es una de las grandes bazas a su favor (y se encargan de que lo sepas recalcándolo en la portada). Los temas que más me han gustado son los que hacen acto de presencia en el tercio final de la aventura con una composición en concreto, "The Flying One" que es el tema principal del juego y sin duda de lo mejor del mismo para mí.
Haciendo mención a los efectos, así como la OST son tremendamente buenos, detallitos como el eco dan buena cuenta de lo cuidado que está todo en este sentido. He podido escuchar tanto el doblaje inglés como el japonés y ambos están a un grandísimo nivel, pocas cosas malas se pueden decir en cuanto a lo que entra por las orejas se refiere.
Y revisando todo un poco para el análisis hay algo que casi paso por alto, el arte de todas las ilustraciones oficiales me parece precioso, pega mucho con la estética que llevaron a pantalla e incluso el logo es un gozo de observar.

Concluyendo diría que, como bien comenta todo el mundo, me subo al carro de promulgar que es un imprescindible, nadie que disfrute con la sobremesa de Nintendo debería dejar pasar de largo The Last Story, es un gran RPG que a pesar de tener pequeñas carencias a mi forma de ver en cosas como la historia o lo caótico que resulta el combate en ciertos puntos, es capaz de dar unas cuantas horas más que buenas a casi cualquier tipo de persona.

Bueeeno tras todo este rollo, y si alguien consigue llegar hasta aquí, me gustaría que me dijese que le ha parecido el juego si se lo ha terminado, y si aún no le ha hincado el diente, si he conseguido que le entren ganas de al menos darle una oportunidad, perdonad por el tostón y disfrutadlo! ≧◉◡◉≦





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